Sospechosamente sospechoso (II)

Habíame situado yo delante del lavabo, frente a un espejo traicionero por su sinceridad, con la intención de librar temporalmente mis capilares faciales de sus eternos ‘salidos’. Vamos que pretendía afeitarme. Pongo la radio, así de forma aleatoria. Musiquita, necesito musiquita. Pero la omnipresente locutora de radio-formula tiene que hablar. ¡Pon discos y calla coño!
Presenta la canción siguiente al estilo ‘Morenin’, como si fuera la quintaesencia de la música. Evidentemente no lo era. Se trataba de Melendi. Interpretando (por decir algo) una mamarrachada (vaya se me escapó)(han conseguido que me caiga bien estopa, coño) llamada ‘caminando por la vida’, por lo visto sale en muchos sitios y/o ha sido cabecera de algo, que se yo, y que me importa.
El caso es que poquito a poco, según voy degustando la delicatenssen…. empiezo a entornar los ojos, mientras froto mi pulgar con el índice insistentemente (si, como si tuviese una pelotilla). Los que me conocen saben perfectamente el significado de dicho movimiento instintivo. Juro que no es maldad, viene en mis genes (si, lo sé, en los genes pueden venir, pero no es el caso. Llevémonos bien).
Bueno, pues ese gesto, siendo bueno, significa que ‘eso’ ya lo he escuchado con anterioridad. Pero no, no me sale, no consigo localizarlo. Mis neuronas trabajan bajo presión, pero no, no hay forma. En casos como esos, utilizo un truco (Rex vuelve) que me funciona casi instantáneamente:
Cierro los ojos, me tapo los oidos lo suficiente como para que mande mi subconsciente y me lleguen la tonadilla como si estuviese dentro de un tonel.
Con ello consigo diferenciar qué zona es. Descartado el estribillo, me concentro en las estrofas, y voilá, salió: Se trata de Nights in white satin (edulcorada con lolaileo y rumbita, eso si)(que malas son las drogas) de los Moody Blues.
Llegado a ese punto, mi incredulidad llega a cotas escandalosas. No puede ser. No puede tener cojones de fusilarlo sin medida. Hombre, viendo casos cercanos, puede que el ‘creador’ no se dé cuenta (sin pensar mal, vamos). Pero coño, alguien ha tenido que decírselo. A la hora de garbar un dsico hay mucha gente y a alguien se le tiene que escapar seguro.
Ahí es dónde empieza mi mosqueo. Si lo ha hecho es simplemente porque pasa ampliamente de que lo pongan verde o peor todavía, está tan convencido de la incultura musical de la gente que con un par…. ahí lo tienes publicado, y para mas INRI de single

JOooooooooooooooooooodeeeeeeeeer mientras escribo esto…. suena…… ‘pleased to meet you….. aiiiiiiiinnnnnnn’ ‘uh uhhhhhhhhhh’ ‘uh uuuuuuuuh’ con voz de pito. Eso sólo puede ser la versión de los G’&’R del clásico de los Stones. AAAAAAAAAArg siiiiii lo es. Corto y cambio, que me voy a cortar las venas. ¿Ves? , no se puede poner a caer de un burro a lo patrio. Siempre hay alguno que te recuerda que poca vergüenza hay en todos lados.
Claro que por lo menos, ‘esto’ es una versión. Habrán pagado por destrozarla. Lo otro es un fusilamiento. De ahí es más dificil ponerle la multa. sic.

2 thoughts on “Sospechosamente sospechoso (II)

  1. ozymandias says:

    La canción «caminando por la vida» sirve de soporte a un anucio de una chocolatina (no voy a decir cuál, porque desde que vi el anuncio ya no la compro) en la cual el sujeto este Melendi se come una y dice «este es el chocolate que más me pone». Terrible.

    «Ahí es dónde empieza mi mosqueo. Si lo ha hecho es simplemente porque pasa ampliamente de que lo pongan verde o peor todavía, está tan convencido de la incultura musical de la gente que con un par»

    Ahí lo tiene usted. Más que incultura musical, yo diría incultura a secas.

  2. Dieguin Nodoyuna says:

    Weno….

    Mientras en toooooda Europa y los USA Brusito era Número 1, en España solo estaba en el 2, detrás de… ¡Premio!… Melendi… Pais!

    «Mmmm… Este tal Melindres… Hagan que parezca un accidente»
    Jon Landau, ojeando las listas de éxitos de Europa, 2005

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