Cada 20 de noviembre, cada vez menos gracias al paso del tiempo, en casi todos los medios sale a colación que tal día falleció Francisco Franco.
Si hay un grupo mediático que se esmera en ensalzar día a día los ideales que él representaba, no es otro que el de Intereconomía. Entre el abanico de medios, el más ruidoso en todos los sentidos suele ser el de la televisión en TDT con el mismo nombre y de logo un toro (¿’¡’¡’?). En ella, suele haber una tertulia de tinte político llamado ‘El Gato al agua’, que en realidad se aleja al infinito en cuanto a la seriedad de criterios, para convertirse por tendencias en otro Sálvame (ex-tomate). Su marcado estilo hiriente, poco respetuoso y radical de posturas así lo acredita.
Todos hemos visto cómo funcionan estos actos cirsenses: Se invita a varios personajes, cuanto más polémicos mejor, los cuales defienden posturas tan extremas que llegan a rozar lo absurdo. Curiosamente, como se ven las caras en casi los programas, con el tiempo dejan de tener sentido los argumentos individuales para entrar en el terreno personal y de rencillas contra los del grupo contrario.
Para el que no vea semejante cadena, ejemplo de lo que digo podría ser el debate de La Noria en Telecinco, que dicho sea de paso, no se aleja mucho de todo lo que he expuesto con anterioridad.
Bien. Todo este preámbulo es para ponernos en situación.
Lo que me ha llevado a picar este posteo es la frase más surrealista escuchada en el último mes (y mira que nuestro presidente, ministros y oposición se empeñan en llevarse ese premio). La frase en cuestión se la decía un tertuliano a otro (de tendencias contrarias) en una discusión sobre el caso Sitel:
Lo que me ha llevado a picar este posteo es la frase más surrealista escuchada en el último mes (y mira que nuestro presidente, ministros y oposición se empeñan en llevarse ese premio). La frase en cuestión se la decía un tertuliano a otro (de tendencias contrarias) en una discusión sobre el caso Sitel:
‘Perdone que le interrumpa, me puede decir lo que quiera, me puede seguir insultando ahora si quiere, pero no me tutee por favor’
Moraleja: Lo importante es guardar la compostura, no el perder la vergüenza y/o educación.
Reflexión: Si es que hemos creado una sociedad en la que es más importante la apariencia que el fondo. 😉
Postdatas y aclaraciones:
PD: este problema no lo tiene los angloparlantes, ¿ves? ‘Tú’ siempre es ‘you’ y ‘usted’ siempre es ‘you’. Pero claro, eso no lo importamos a nuestra cultura, jejej. El ‘jalogüín’ es más ‘cool’, ¿aonde va a pará?, jejej
PD: este problema no lo tiene los angloparlantes, ¿ves? ‘Tú’ siempre es ‘you’ y ‘usted’ siempre es ‘you’. Pero claro, eso no lo importamos a nuestra cultura, jejej. El ‘jalogüín’ es más ‘cool’, ¿aonde va a pará?, jejej
Aclaración: No, no he visto ese debate, sólo he visto el corte concreto en Sé lo que hicisteis. Como veréis tengo mejores cosas que hacer que poner la cadena del toro.
Afiladito, si señor.
Pues no vastaba con eso, no… Hoy andaba yo en casa de mi mae y la criatura mía suele poner y gustar (aunque niegue y reniegue de éllo) de programas al uso… Hoy era uno dirigido y presentado por la impagable Mª Teresa Campos, que desde luego, hay que reconocer que hacer lo suyo, lo sabe hacer muy bien, que versaba ni más ni menos que sobre la vida de la nieta de Franco, creo que se llama Carmen Martinez Bordiu (el segundo apellido no sé si lo escribo bien aunque ahora sé que está bien porque mi santo lee el ¡Hola! en su trabajo en los ratos libres según me confiesa y me lo dice.) Entre la situación de mi madre, yo que llevo todo el dia con un dolor de cabeza que me dan ganas de agarrarme a una puerta y tirarle un bocao, el programa de los cojones con repaso por la muerte del «Invicto» ; boda de la antescitada con un Borbón degollado más tarde cuando practicaba sky; la madre de la antedicha visitando el Valle de los Caídos (en mayúscula por no cometer una falta de ortografía más de las que cometo) entre energúmenos con chaquetas de ante, camisas azules, boatinés verdes dando alaridos de «¡Franco,Franco!» y cantando el cara al sol… Todavía no he podido cenar de las ganas de vomitar que tengo… Y luego los del Alakrana y luego un pobre agricultor que le compran la leche a 20 centimos… ¿No hay cosas más interesantes para ocupar no sé cuantas horas de espacio televisivo que la nieta de Franco, por Dios? Y luego, como no, los corifeos o tertulianos estos, que la mayoría entre cirugías estéticas imposibles, prótesis dentales y vaya usted a saber qué más no se les entendía un carajo, queriendo todos hablar a la vez. El tema de enjundia del programa, átate los machos: que el mayordomo de Franco, que no tenía pinta de estar precísamente necesitado el señor, ha escrito un libro sobre la vida íntima de aquél… ¡¡Seguro que se vende como tejeringos!!
Os dejo, creo que por fin voy a vomitar, a ver si puedo cenar.
Aplicado a nuestra TV… no me gusta la televisión que realizan en esa cadena, ni la radio que hace la COPE, pero… reconozco que tampoco es de mi agrado la otra cara de la moneda mediática (la que por cierto es más abundante en cantidad y en capacidad de ‘lobotomizar’ cerebros post-LOGSE’s y derivados).
Cuando iba al curro escuchando las noticias en la radio (ahora me pongo un USB y feliz) tenía la sana costumbre de escuchar un lunes la COPE, el martes la SER, el miércoles ONDA CERO… y así para el jueves o viernes ya tenía una opinión propia de la realidad semanal. Que a veces dueles escuchar según que cosas, sí, pero es la única forma de que nadie te la meta doblada.
Ahora mismo se me viene a la cabeza el Do the evolution de Pearl Jam. Algo querrá decirme mi subconsciente, jejeje.
«tenía la sana costumbre de escuchar un lunes la COPE, el martes la SER, el miércoles ONDA CERO… y así para el jueves o viernes ya tenía una opinión propia de la realidad semanal…»
Algo parecido solía hacer yo en mis noches de estudio, sip, costumbre que copié todo hay que decirlo del padre de un antiguo amigo, falangista consecuente el hombre, todo hay que decirlo y mira qué ironías tiene el Graciosillo Supremo, precísamente tratando el posteo y comentarios de lo que tratan. Ahora suelo poner el National Geographic y… poco más.
¡Jejejej! Sobre el Do the evolution… Tanto canción y vídeo se me han estado viniendo a la mente en muchos momentos, especialmente, desde que murió mi perro. A veces es dificil distinguir entre locos, genios, profetas o farsantes. La línea que los separa es muy fina.