No acababan más que empezar los noventa y a un francesito llamado Jean Michel Jarre se le ocurría pensar en espectáculos con mayúsculas, grandiosos para unos y grandilocuentes para otros. Eran momentos en los que te gustara o no la música electrónica… había que reconocerle el atrevimiento y esfuerzo por ser distinto.
Recuerdo que por aquel entonces se televisó un concierto realizado en Paris. El caso es que esa retransmisión fue la primera vez que supe de una ‘performance’ con el entorno arquitectónico como escenario. Luego llegaron muchos más a lo largo de casi todas las ciudades importantes. Incluso hubo uno en la Sevilla post Expo92. Había que ser muy especialito para no acercarse a la Cartuja y formar parte del momento. Yo no fui, por supuesto. jejje.
Ha pasado el tiempo. Tanto que la verdad dejó de impresionarme variantes y mejoras a la idea originaria. Ha dejado de impresionarme… hasta hoy.
Atentos a la montada por AC/DC como promoción de Iron Man 2
Es genial utilizar el castillo de Rochester para amasarlo a gusto, destrozarlo y rearmarlo mediante nuevas técnicas de proyección con mapeado 3D. En realidad no se aleja mucho de la idea de Jean Michel, pero no me negareis que el resultado es ‘espestaculá’. Y todo a ritmo del blues-rock chillón que AC/DC ha hecho toda la vida.
Viejales a la última, ¿qué más se puede pedir?. Supongo que la peli valga la pena, pero… eso es harina de otro costal (y no le tengo muchas esperanzas, la verdad). Seamos positivos y esperemos que el guión haga justicia a una canción bastante más que decente…
Por cierto, no sé si engrandece el final de la canción al final de la proyección o al revés (o se engrandecen mutuamente), pero… me encanta.
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